Hace unas cuantas semanas, tras realizarce una denuncia de hechos que revelan los presuntos nexos de la clase política hidalguense con Heriberto Lazcano Lazcano, líder del grupo de narcotraficantes Los Zetas, la PGR inicio una averiguación previa. La indagatoria incluye al exprocurador general de la repúblia, Rafal Macedo de la Concha, al Gobernador de Hidalgo Miguel Ángel Osorio Chong y a su delfín el presidente municipal Francisco Olvera Ruiz, así como al procurador de justicia del estado, José Alberto Rodríguez Calderón. Y la lista es todavia más larga...
Financiamiento de campañas políticas, protección oficial a Los Zetas, ligas entre grupos priistas y tráfico de drogas, así como una amplia rotación de funcionarios públicos (en su mayoría policías, agentes del Ministerio Público y delegados de la Procuraduría General de la República en varias entidades) “para favorecer los intereses del narcotráfico en el estado de Hidalgo”, son algunas de las acusaciones contenidas en una denuncia de hechos presentada el 11 de marzo pasado ante la Subprocuraduría General de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) para que lleve a cabo una investigación federal.
El documento, de 61 páginas, involucra al exprocurador Rafael Macedo de la Concha; al gobernador de Hidalgo, Miguel Osorio Chong; al precandidato priista a la gubernatura de esa entidad, Francisco Olvera Ruiz, así como a decenas de funcionarios y exfuncionarios estatales y federales, en la protección de Los Zetas y de su jefe, Heriberto Lazcano Lazcano, El Lazca, quien por cierto es hidalguense.Proceso tiene una copia de la denuncia, que fue elaborada por el llamado Grupo Ciudadano Hidalguense. En la PGR pudo confirmarse que el signatario es Raúl Miguel Olvera Rodríguez y que el documento llegó a la SIEDO a través de un servicio de mensajería.
Olvera Ruiz es el favorito del gobernador Osorio Chong para sucederlo. Apenas el 30 de marzo solicitó licencia para separarse del cargo de presidente municipal y se registró como precandidato del PRI a la gubernatura el martes 6.Después de analizar la denuncia, la SIEDO determinó que sí existen elementos constitutivos de delitos federales en contra de Osorio Chong, de Olvera Ruiz y de una veintena de funcionarios más, por lo que procedió a integrar formalmente la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDORPIFAM/185/2010. Los delitos: delincuencia organizada y lavado de dinero.El documento establece que el objetivo de poner en manos del Ministerio Público Federal presuntos hechos constitutivos de delitos es que se investigue “la dicotomía poder político-narcotráfico en el estado de Hidalgo y que se conozca toda la información con la que contamos respecto a la situación de la narcopolítica”, y dice confiar en que, con los datos que se aportan, la PGR podrá complementar, sistematizar y contextualizar la información obtenida en indagatorias y le permitirá cerrar sus círculos de investigación.El Grupo Ciudadano Hidalguense señala que el exprocurador Rafael Macedo y el líder de Los Zetas, Heriberto Lazcano, “se identifican y (tejen) un acercamiento debido, entre otras razones, a que ambos son originarios del estado de Hidalgo”.A partir de ese acercamiento –agrega el documento– comenzaron a moverse las piezas en varias entidades del país para proteger a Los Zetas. Se cita como ejemplo el hecho de que, cuando Alfonso Navarrete Prida (exprocurador de Justicia del Estado de México y actual diputado federal por el PRI) fue investigado en la PAR}} por la presunta venta de plazas en la PGR para favorecer al cártel de Juárez, el personaje clave para su exoneración fue Jorge Frías Vázquez, quien le dio una salida decorosa.
Frías Vázquez es actualmente secretario particular de José Alberto Rodríguez Calderón, procurador de Justicia de Hidalgo y presunto protector de Los Zetas en esa entidad, asienta la denuncia.Y se añade otro dato: “Frías Vázquez cumple con una función toral en la protección institucional en el estado de Hidalgo a las actividades de narcotráfico que la organización criminal de Los Zetas desarrolla. El vínculo de Jorge Frías con este grupo delictivo se estableció en el estado de Guerrero cuando se desempeñaba como subdelegado de la PGR, bajo el mando del entonces delegado José Alberto Rodríguez Calderón”, el actual procurador de Hidalgo.En la lista de policías que la denuncia señala al servicio del narcotráfico en Hidalgo resalta Raúl Batres, nombrado por la PGR delegado regional de la AFI en Hidalgo “a petición del cártel del Golfo”. El objetivo, según la denuncia, era claro: “proteger a Los Zetas”.
Otra pieza importante en la protección de Los Zetas en Hidalgo, según el documento, es el procurador de Justicia José Alberto Rodríguez Calderón, “nombramiento que le debe a Eduardo Osorio, hermano del gobernador”.Rodríguez Calderón es señalado como “aliado del exprocurador Rafael Macedo”: fue delegado de la PGR en Guerrero en 2003, donde se relacionó con los hermanos Beltrán Leyva, en ese momento aliados del cártel de Sinaloa que encabeza Joaquín El Chapo Guzmán. Desde entonces, según la denuncia, “cumple a cabalidad con la encomienda de proteger y apoyar a Los Zetas”. El documento añade: “Ahora lo haría, para beneplácito de El Lazca, desde la Procuraduría del estado de Hidalgo”.Las ligas de funcionarios públicos con el crimen organizado ha estado marcada por la muerte entre paisanos hidalguenses en posiciones encontradas: unos como aliados del narco, otros como investigadores de la PGR.
Un ejemplo es el secuestro, tortura y asesinato del agente del Ministerio Público Federal adscrito a la SIEDO, Gustavo Flores Delgado, en mayo de 2005, en Acapulco, Guerrero, cuando investigaba al cártel de los hermanos Beltrán Leyva, quienes controlaban la plaza.Flores Delgado estaba bajo las órdenes de su paisano José Alberto Rodríguez Calderón, con quien “convino los términos de la operación en Acapulco”. Sin embargo, se habría enterado de que se pretendía favorecer al cártel del Golfo y su fuerte aliado en aquel tiempo, Los Zetas.
EL POSICIONAMIENTOEl control que ejercen Los Zetas en Hidalgo no ha mantenido a la entidad alejada de la violencia. Aunque con presunto apoyo oficial Los Zetas lograron sortear los embates del cártel de Sinaloa, su más fuerte competidor, dentro del gabinete de Osorio Chong habría surgido presuntos desarreglos financieros.Ejemplo de ello es el asesinado, en 2009, de Marcos Souberville, secretario de Seguridad Pública del estado, poco después de una ola de crímenes y secuestros en el estado:La presión social hizo que, en su momento, para justificar su inacción, el secretario de Seguridad Pública, Marcos Souberville, dispusiera la creación de un grupo especial antisecuestros que en realidad no resolvería pero que, en el terreno, haría perder el control directo de esa actividad a sus colegas funcionarios relacionados con el tema de seguridad y, lo más importante, los haría perder presencia ante Los Zetas para él posicionarse mejor ante la organización.De inmediato Eduardo Osorio Chong, hermano del gobernador, acuerda con Francisco Olvera Ruiz, entonces secretario General de Gobierno, instruya a José Alberto Rodríguez Calderón para que se pongan las cosas en orden. Rodríguez Calderón les pide al director de la Policía Ministerial y al comandante antisecuestros, Jesús Garcés, El Garocho, la eliminación de Marcos Souberville.Ambos planean la ejecución con la intervención de Los Zetas. El día de los hechos, Rafael, secretario particular de Souberville, informa telefónicamente a Esteban Reyes y a El Jarocho que ese día por la tarde su jefe iría solo a Huasca. Conforme al plan, Esteban y El Jarocho se comunican con El Cepillo (detenido en Tepic, Nayarit) y con otro grupo de Los Zetas, quienes harían el trabajo.De toda la operación, de principio a fin, mantuvo informado a Eduardo Osorio, hermano del gobernador. Los Zetas arman el operativo pues era hora, además, de cobrar venganza contra Souberville por el “gane” de varios millones de dólares cuando en Atotonilco la policía detuvo a varios Zetas.El comando fue dirigido por El Pahua. Lo acompañaron El Peluche, El Bien Peinado y El Gato. Se formó un convoy con una camioneta Chevrolet Tahoe y una Blazer blanca. Los tripulantes fueron El Cepillo y El Luis, comandantes de Los Zetas en Huejutla, Hidalgo, por acuerdo de Omar Zerón Flores, cercano colaborador y operador de Eugenio Imaz, alto funcionario del gobierno del estado y hombre de confianza del gobernador Miguel Osorio.El comando se dirigió a las inmediaciones de Huasca de Ocampo, Hidalgo. A las 17:30 horas del miércoles 19 de septiembre de 2007, el secretario de Seguridad Pública, Marcos Souberville, fue ejecutado.El funcionario iba acompañado, según la denuncia, por un sujeto llamado Marcos Covarrubias, quien sobrevivió al ataque “extrañamente”